DIEGO EL CABRILLERO – LAS ENTRAÑAS JONDAS DE UN AGRICULTOR

 

Mamó el flamenco desde niño al nacer en Utrera en el seno de una familia gitana, su madre, La Cabrillera, cantaora por diversión a la que todos los que la conocieron aseguran que era una estupenda bulearera, vivió el flamenco en su casa desde temprana edad, ya que era hermana de Antonio El Chocolate. Con estos antecedentes nació en 1944 Diego Amaya Núñez, el cual como era costumbre en los pueblos de Andalucía se le conocería con el sobrenombre familiar de El Cabrillero. Aparte de las fiestas vividas en su casa y patios del barrio, Diego El Cabrillero frecuentaba las tabernas para saciar el veneno del flamenco que llevaba en la sangre y se pasaba las horas escuchando a Fernanda y Bernarda, Manuel de Angustias, Gaspar de Utrera, Perrate y otros pedazos de artistas no profesionales que deleitaban a los aficionados que se daban citas en tabernas cómo Limones o El Chori, donde llegaban los trabajadores después de terminar sus faenas ávidos de escuchar el cante más enjundioso de la comarca. Lo que escuchaba con mucha atención lo ensayaba en casa y siendo aún un adolescente se atrevió a cantar delante de sus mentores, siempre con mucha vergüenza, ante la calidad que atesoraban los participantes en estas reuniones.

De las tabernas saltaría a los concursos de cante, paso obligado para darse a conocer a la afición en aquella época y aunque ganó bastantes de ellos, su popularidad no saldría del círculo de cabales, esos que saben escuchar, esos que ven enseguida quien busca con el cante “El tronco negro de Faraón”. Cómo muchos otros artistas, caso de Santiago Donday o Tío Mollino, Diego El Cabrillero nunca quiso dedicarse a este arte en exclusiva, teniéndolo más como hobby o una segunda profesión, aunque esto le supusiera perder horas de descanso, así lo cuenta para Utrera Digital: “A Diego nunca le deslumbraron los focos ni el glamour de los escenarios ya que, a pesar de tener mucho talento, nunca se decidió a dar el paso de dedicarse por entero al mundo del cante, y continuó siempre trabajando como agricultor. «Alguna vez he llegado a las tantas de la madrugada de un concurso de cante y por la mañana me iba directamente al campo a trabajar. Bambino me pidió en muchas ocasiones que me fuera con él a Madrid a formar parte de distintos espectáculos, pero al final nunca me decidía, quedaba con él, pero a la hora de la verdad yo no aparecía», explica Diego”. 

Con estas premisas se unió a los que se llegó a denominar por los aficionados como “los profesionales de los concursos” que coincidían cada fin de semana en los eventos de cantes más prestigiosos que organizaban las peñas flamencas andaluzas, llegando a profesarse mutua admiración y amistad entre ellos en una sana competencia, alcanzando las finales y repartiéndose los primeros puestos según estuvieran cada uno esa noche.

Más de una vez se ha confesado admirar las formas cantaoras del triángulo mágico que conforman Utrera, Lebrija y Jerez, de los que están impregnados sus cantes, profesando su admiración por Fernanda, Bernarda, Perrate, Mairena y su propio tío Antonio El Chocolate del que toma prestada en algunas ocasiones su impronta jonda, tamizando todo lo vivido para crear su propia personalidad cantaora con la que encandila a la afición.

Su fuerte eran las reuniones, juergas y locales reducidos como las Peñas, salas de conciertos y pequeños teatros, participando también en numerosos ciclos como “Entre Naranjos y Olivos” organizado por la Federación de Entidades Flamencas de Sevilla, Flamenco Viene del Sur, Noches de Julio, Utrera Suena… Giró y dio sus mejores prestaciones con las guitarras compañeras y amigas de Pedro Bacán y Antonio Moya, el primero lo incorporó a su espectáculo “El Clan de los Pinini” actuando por diferentes ciudades de la geografía española, llegando a actuar en el Teatro Déjazet de Paris en 1989, haciendo lo propio con el nimeño, concluyendo también en París con el espectáculo “Utrera Viva” dentro del XVII Festival Flamenco de Mont de Marsan de 2005. En su trayectoria artística también se enfrentó en menor medida a los grandes eventos, los festivales andaluces y varias ediciones de la Bienal de Arte Flamenco Ciudad de Sevilla, pasando también por el Festival Flamenco de Madrid.

En 1985 es llamado para participar en una ambiciosa obra audiovisual cuya pretensión era llevar la historia del flamenco a las aulas, para ello se realizaron una veintena de capítulos que se plasmaría en vídeos bajo la dirección de Alfonso Eduardo Pérez Orozco. Diego El Cabrillero participaría en uno de ellos acompañado por la Guitarra de Pedro Bacán en un mini recital. Este proyecto fue auspiciado por la Consejería de Educación y Ciencias de la Junta de Andalucía y fue distribuidas por bibliotecas, escuelas, institutos, universidades y peñas flamencas en Andalucía, siendo emitidos por diversas televisiones locales.

El 30 de julio de 1988 se viviría un momento irrepetible, las buenas dinastías de artistas flamencos locales (Jiménez, Fernández, Núñez, Peña, Requelo, Vargas...)  tomaron el Castillo de Utrera con un espectáculo que recreaba una fiesta gitana que resultaría inenarrable "Utrera y su Compás" la cual tenía fines benéficos, lo recaudado se invirtió en remodelar el paseo de Consolación de la localidad. El espectáculo contaba de dos partes, una de cantes más duros en la que Diego El Cabrillero actuaría con la guitarra de Pedro Peña y otra, con la fiesta donde actuarían las familias con sus miembros profesionales y aficionados.

Diego El Cabrillero es un cantaor de largo repertorio, aunque destaca sobremanera en los cantes más duros y jondos del flamenco, cantes a palo seco, en seguiriyas, soleares, bulerías por soleá, agarrando bastante bien, fandangos, tarantos, bulerías y las cantiñas.

DISCOGRAFÍA DE DIEGO EL CABRILLERO

El flamenco se ha caracterizado por ser un mundo atípico comparado con otras disciplinas musicales, ha carecido siempre del apoyo underground que han tenido por ejemplo el blues, revistas especializadas y discográficas manejadas por buenos aficionados tendentes a no dejar artistas de culto sin darlo a conocer al aficionado, fomentando la promoción y difusión de sus obras y trabajos. 

Hasta 1993 Diego el Cabrillero no pisó un estudio de grabación, fue través de la pequeña firma utrerana Fods Records que se dedicaba a reeditar flamenco ya grabado, bien en pizarra o microsurcos, generalmente en cintas. El escaso catálogo de ediciones propias estaba condicionado con una política austera incompatible con una promoción de verdad, las obras nuevas salían en cintas de casetes y si tenían un mínimo de ventas las sacaban en formato CD. Con estas premisas salió al mercado el disco de El Cabrillero, ante la escasa promoción en el propio artista quien se encargaría de vender las cintas al aficionado en los bares, tabernas y en las propias actuaciones.

DIEGO EL CABRILLERO – RECUERDOS DE MIS GENTES FODS RECORDS 1993 CD

GUITARRA: PEDRO SIERRA

1-.   SOLEÁ POR BULERÍAS

2-.   TARANTO

3-.   TANGOS

4-.   SOLEÁ

5-.   SIGUIRIYA

6-.   BULERÍAS

7-.   MALAGUEÑA

8-.   FANDANGOS

9-.   SIGUIRIYA

10-. FANDANGOS

Durante 1995 y 1996 Luis Soler y Ramón Soler trabajan en la edición de “Testimonios Flamencos”, 40 CD (36 de ellos de cantes inéditos procedentes de actuaciones en directo y 4 de discos de pizarra) que acompañaban los 5 volúmenes de la “Historia del Flamenco”, editada por Tartessos en 1996. En el CD 14 de esta serie aparece recogido un cante de Diego el Cabrillero.

"HISTORIA DEL FLAMENCO"-TESTIMONIOS FLAMENCOS- EDICIONES TARTESOS 1.995

12-. NADIE DIGA QUE MIS DUCAS (MARTINETE) 1991

 

La serie Flamenco y Universidad que dirige el catedrático jerezano Rafael Infante y en la que colabora toda la comunidad universitaria de Andalucía incluida la UNIA, le dedicará uno de sus volúmenes al cantaor utrerano. Serie que, entre otras cosas, se dedica a rescatar del olvido voces que mediáticamente nunca han gozado del oportuno apoyo del flamenco oficial. El disco fue grabado en los estudios de Domi Serralbo que tiene en Morón de la Frontera y contó con la colaboración del cantaor Rafael de Utrera.

DIEGO EL CABRILLERO – EL SENTIR DE DIEGO EL CABRILLERO FONORUZ 2016 FLAMENCO Y UNIVERSIDAD VOL. XXXII

GUITARRA: MANOLO FRANCO

1-.   MALAGUEÑA

2-.   FANDANGOS

3.    BULERÍA

4-.   ZAMBRA

5-.   BULERÍA POR SOLEÁ

6-.   SERRANA

7-.   BULERÍA

8-.   SOLEÁ CON NUDILLOS

9-.   SOLEÁ

10-. BULERÍA

11-. CANTIÑAS

12-. FANDANGOS

13-. TARANTO

14-. SIGUIRILLA

15-. MARTINETE